Villalobos: Del crítico de religiosos al abogado del chavismo

José Miguel Villalobos: de atacar a líderes religiosos a moldear sus principios según sus clientes

En enero de 2016, José Miguel Villalobos Umaña, el hoy abogado de Rodrigo Chaves, publicaba un artículo en TicoVision titulado «Utilización de las religiones como manipulación política en Costa Rica». En ese momento, arremetía con vehemencia contra los líderes religiosos que buscaban cargos públicos, apuntando claramente a Fabricio Alvarado y el partido Restauración Nacional.

Villalobos calificó como «aberrante y vulgar» el uso de la religión en la política, defendiendo la necesidad de separar ambos mundos. Pero parece que, con el tiempo, la brújula ética de Villalobos ha encontrado una extraña flexibilidad: hoy, no solo es el abogado de Rodrigo Chaves, sino también un activo estratega para consolidar el movimiento chavista en el poder.

La moral ajustable de Villalobos

En su artículo de 2016, Villalobos se explayó sobre cómo los «pseudo-pastores» manipulaban a sus fieles con discursos vacíos y promesas de salvación eterna. Hablaba con una indignación que hoy suena más a discurso de campaña que a verdadera convicción:

«La utilización de las religiones como instrumento de manipulación política es aberrante y vulgar.»

Pero, ¿Dónde quedó esa indignación? Hoy, Villalobos alterna su tiempo entre defender a narcotraficantes, violadores y estafadores, y buscar aliados que ayuden a perpetuar el poder chavista. ¿Habrá dejado su sentido crítico en el archivo de TicoVision, junto con sus principios?

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Fabricio Alvarado y Villalobos: de enemigos a aliados

Lo irónico no termina ahí. Villalobos, quien criticaba a líderes como Fabricio Alvarado en 2016, ahora se encuentra del mismo lado político. Fabricio y su fracción legislativa, aliados de Rodrigo Chaves, representan los mismos intereses religiosos que Villalobos condenaba con vehemencia.

¿Principios o conveniencias?

La historia reciente de Villalobos parece escrita con tinta de oportunismo. Hoy, su discurso se acomoda a lo que convenga al cliente de turno, ya sea un narcotraficante o el presidente Chaves. ¿Se habrá olvidado de sus palabras sobre el peligro de mezclar religión y política, o simplemente las ajusta según el viento político?

Reflexión: ¿Hasta dónde llega la doble moral?

En Radio Zurqui, invitamos a reflexionar: ¿Qué tan confiables son las palabras de alguien que adapta sus convicciones según el cliente que le pague? Si Villalobos pasó de denunciar a Fabricio Alvarado a ser su aliado indirecto, ¿Qué otros principios está dispuesto a cambiar?

 

 

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