Incongruencia en la Lucha Anticorrupción: Selectividad en las Críticas y Silencio Cómplice
En el escenario político costarricense, se ha observado una creciente incongruencia entre los seguidores del presidente Rodrigo Chaves al abordar el flagelo de la corrupción. Un fenómeno preocupante se manifiesta cuando aquellos que critican vehementemente los actos corruptos del pasado parecen cerrar los ojos ante las prácticas cuestionables de la actual administración.
Los seguidores de Chaves son los primeros en señalar con el dedo acusador a miembros del Partido Liberación Nacional (PLN) por cobrar sobresueldos. Sin embargo, ahora, sorprendentemente, estos mismos individuos se apresuran a defender a la presidenta de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), a pesar de las serias acusaciones en su contra.
Incluso figuras prominentes, como Juan Diego Castro, arremeten contra la contralora pero guardan un silencio ensordecedor ante las denuncias de corrupción que involucran a la máxima autoridad de la CCSS.
@entrevocescr Juan Diego Castro a Marta Acosta, Contralora General de la República: Váyase para la casa, usted es la peor contralora de la república de Costa Rica, renuncie y deje de hacerle tanto daño a este país. #martaacosta #contralora #contraloríaparaquientrabaja #renuncie #casolatrocha #latrocha #cementazo #elcementazo #casocochinilla #cochinilla #banconacional #escaners #ciudadgobierno #ciudadgobiernocostarica #sinart #comisiónsinart #ahorasomosentrevoces #entrevocescr #entrevoces #entrevoces2023 #ENTREVOCES #ruddycentenocascante ♬ sonido original – Entre Voces CR
Este postura deja entrever una peligrosa selectividad en la lucha anticorrupción, planteando la pregunta fundamental: ¿Qué le sucede a Costa Rica que ataca la corrupción de manera tan sesgada?
Reunión chavez con la CONTRALORA, un encuentro entre la prepotencia y la institucionalidad
Es especialmente alarmante cuando se examina el caso de la contralora, quien no enfrenta ninguna causa pendiente y cuyo único delito es velar por la Constitución y detener proyectos de Chaves que podrían socavar la institucionalidad del país. Por otro lado, la presidenta de la CCSS se ve envuelta en acusaciones de maquillar informes y resistirse a devolver fondos indebidos.
La paradoja de esta situación lleva a reflexionar sobre el momento en que los costarricenses permitimos que la manipulación en nombre de la democracia socavara sus valores. ¿Cómo es posible que en la búsqueda de un sistema democrático, estemos destruyendo precisamente aquello por lo que luchamos?
Es imperativo que como sociedad nos cuestionemos, examinemos y exijamos coherencia en nuestra lucha contra la corrupción. La democracia no puede ser un escudo para encubrir actos indebidos, y la selectividad en las críticas solo debilita la integridad de nuestras instituciones. La transparencia y la responsabilidad deben ser valores incuestionables en el camino hacia un futuro más justo y democrático.