Albino Vargas denuncia discurso incoherente y ofensivo del presidente
La Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP), encabezada por su secretario general, Albino Vargas Barrantes, exigió al presidente Rodrigo Chaves Robles una retractación pública tras las graves acusaciones vertidas el pasado 18 de septiembre durante la inauguración de un Ebais en San Rafael Arriba de Desamparados.
En su intervención, Chaves señaló sin pruebas a Vargas y a Lenin Hernández de supuestos robos de medicamentos, incluyendo fentanilo, en la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS). Además, los atacó con expresiones despectivas frente a ciudadanos, niños y medios de comunicación, lo que ANEP calificó como un acto de calumnia y difamación.
Contradicción desde la propia CCSS
El golpe de Chaves se desmoronó rápidamente. La presidenta ejecutiva de la CCSS, Mónica Taylor Hernández, desmintió al mandatario ese mismo día, indicando: “Aún no ha sido determinado que exista un faltante real de este tipo de medicamentos, sin embargo tampoco puedo descartarlo”.
Con esta declaración quedó en evidencia que el presidente mintió al país, utilizando el poder de su investidura para lanzar acusaciones temerarias.
Vargas: “Un comportamiento repugnante”
En su carta, Vargas calificó el discurso de Chaves como “repugnante, incoherente e incomprensible”, asegurando que avergüenza a Costa Rica en el plano nacional e internacional.
El dirigente sindical exigió que el mandatario honre su palabra y se retracte, advirtiendo que ninguna persona trabajadora de la ANEP aceptará ser vinculada con delitos de narcotráfico.
Señalamientos sobre la salud mental de Chaves
En un giro contundente, la ANEP cuestionó incluso si el presidente goza de las facultades mentales y cognitivas necesarias para ejercer el cargo, sugiriendo que de lo contrario podría alegar inimputabilidad en los cerca de 100 procesos judiciales que enfrenta como imputado.
Repercusiones internacionales
La carta fue enviada no solo a Casa Presidencial, sino también a la Asamblea Legislativa, Corte Plena, Defensoría de los Habitantes, Conferencia Episcopal, Alianza Evangélica, CONARE, embajadas y organismos internacionales como la OIT y la CIDH. Con ello, el reclamo de la ANEP trasciende las fronteras y coloca a Costa Rica en el centro de un debate sobre la ética y el respeto en el ejercicio presidencial.












